Ha sido el tema de la semana, un debate interesante aunque al mismo tiempo desgastante cuando para variar se mezcla con fanatismo. Todas las opiniones son validas, pero a la vez como es normal todas son subjetivas.
Al final de cuentas de eso de trata el ejercicio de opinar, claro para muchos si hay una pisca de rojinegro, morado, o rojiamarillo en la ecuación es más difícil la objetivad.
Trataré de ir por partes y ser lo más claro, aunque sé que mis colores los cuales todo el mundo o casi todo el mundo conoce, serían el arma perfecta para desacreditarme
El martes en el Morera Soto donde estuve como casi siempre que juega la Liga, la gente lo que más cantó fue «el domingo cueste cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar»…. es decir la mente estaba en Herediano y la necesidad manuda de una remontada inédita, épica y valiente.
Necesaria para seguir intentando que Herediano alcance a la Liga en títulos o lo que es peor para un manudo (lo dijo con conocimiento de causa) que Saprissa llegué al tricampeonato y le saque a la Liga nueve títulos de diferencia
Esa reacción del aficionado cuando la Liga se anexaba la estrella centroamericana, fue una demostración contundente de lo que el aficionado realmente quiere. La diferencia de cuatro goles a favor de Alajuelense sobre Real Estelí también lo propiciaron pues la serie estaba en teoría resuelta, pero hasta en la celebración fue lo primero que cantó la barra manuda secundado por el resto del estadio casi en su totalidad….
El mensaje fue gracias pero remonten el domingo, lo cual por cierto la estadística señala como misión imposible
«El Liga campeón» también se escuchó aunque en menor escala, luego se armó la fiesta en las calles de La Agonía de Alajuela, sí hubo alegría y fiesta de acuerdo a la ocasión, pero al mismo tiempo habían un eco en el ambiente para decirle a los jugadores, cuerpo técnico y dirigencia manuda, esto no está finalizado
Entonces es aquí donde viene la pregunta, ¿esto le sucedería a cualquier otra afición? creo que mi respuesta es sí, es más ya Saprissa y Herediano lo vivieron y lo explicaré más adelante, claro fue en menor escala porque son clubes como saldo a su favor en títulos nacionales.
Al mismo tiempo cuando me preguntan ¿Cuál torneo es el más importante? debo decir… que debería ser el centroamericano pero por estar Alajuelense como el protagonista de la historia y por la forma como siempre se jugaron los torneos regionales es ahí donde el orden de prioridades cambia para el aficionado costarricense en general y es comprensible
Me voy a enfocar primero en el tema de la Liga. Creo que es evidente, un cetro nacional de los últimos 19 es un dato que habla por si solo.
Mientras Saprissa se dejó 9, Herediano 6, y clubes pequeños o sin tradición de campeón como Pérez Zeledón, San Carlos y Cartaginés la misma cantidad que el león, pues obvio que todo esto golpea el ego manudo .
Es una década entera de estar «bajo el zapato» de los dos rivales de siempre, especialmente bajo el rival de todos los días (frase de Claudio Ciccia) el Deportivo Saprissa
Entonces es claro que ese no es el ring en que los manudos quieren sentirse los mejores, aunque este cetro fue en un torneo de 20 equipos, incluyendo morados, florenses y brumosos, eliminado incluso a los dos últimos y venciendo en la final» al coco» de los morados
En otras palabras entender ese sentimiento de una gran sector del liguismo (creo que la mayoría) no es nada difícil, pero eso debe condicionar la realidad
El Torneo Centroamericano de Concacaf debería ser el gran objetivo de los clubes ticos en el segundo semestre futbolero del año. pero escribo debería porque en este momento aun no lo es.
Los cuatro clubes nacionales lo tomaron con seriedad y lucharon por ganar una copa que favoreció al mejor no de los cuatro sino de los veinte equipos del torneo en este caso Alajuelense
Lo que pasa es que esa parte de la cultura criolla del aficionado no va a cambiar de la noche a la mañana, con nuestro apasionante torneo que premia dos campeones por año ,bueno ahora son cinco con ese montón de copas adicionales. Lo de apasionante lo dijo medio en serio medio en broma. Pero está claro, ganar el cetro en mayo y en diciembre es lo que todos quieren
Además nuestra confederación poco ayuda a cambiar esa mentalidad al menos en nuestro país, pues no podría opinar por los otros seis piases de la región.
Ojo este torneo concluido el martes estuvo bien en cuanto a organización, difusión televisiva, premios para los equipos tanto deportivos como económicos, por eso se luchó dignamente.
También desnudó realidades como el crecimiento de Nicaragua el estancamiento de Honduras le leve mejoría de Guatemala el desastre de El Salvador, lo diferente que es Panamá entre clubes y selección. Es decir fue revelador, entretenido y hasta levantó pasiones que otras veces ni aparecían en estos torneos
Ojala y se mantenga el formato, crezca el interés, los incentivos económicos sean mayores y hasta allá un premio deportivo adicional mayor para el campeón o los dos primeros aparte obvio del prestigio internacional.
Si eso pasa la mentalidad de los clubes aficionados y dirigentes cambiará, sin menospreciar el torneo local que es el pan nuestro de todos los días, pero esta copa estoy seguro todos la buscarán
¿Pero porque hay que esperar para que suceda si torneos similares se han jugado desde hace más de 60 años?.
La respuesta es muy sencilla la Concacaf históricamente ha manoseado muchos estos certámenes. Les cambia cada poco tiempo, el nombre, el formato, los objetivos, la división de plazas es decir es un caja de sorpresas
Si bien el cambio inició desde hace 6 años cuando se tomó la sabía decisión de dividir la competición en dos torneos y dejar la poderosa billetera de las Ligas MX y MLS, solo para «el torneo grande» del área que se juega en el segundo semestre del año futbolero, o primer semestre del año regular
Antes era Liga Concacaf torneo que ganó Herediano en 2018, Saprissa en 2019, Alajuelense en 2020 y del cual Santos fue subcampeón en 2017 y la Liga en 2022. Ahora es Copa Centroamericana de Concacaf ya sin equipos del caribe o Canadá. Los del caribe tiene su propia copa y los de Canadá los acomodan de otra manera en el principal torneo
Todo eso ha sido positivo, pero el aficionado creo no le encuentra sabor cuando todos los años se cambia algo, al final recordemos que cuando florenses y morados alzaron la Liga Concacaf aun en menor escala empezó el tema de si este torneo era más importante que el nacional.
Cuando lo ganó la Liga, por cierto con Carevic en en banquillo, por calendario se jugó después del cetro de diciembre de 2020 que esa vez sí le sonrío a la Liga, entonces no hubo debate.
Herediano hizo » la mesa gallega» en 2018, entonces todo bien para ellos, pero Saprissa en el 2019 con Centeno en el banquillo no logró el trofeo de diciembre a nivel local, pese a ganar el internacional y por eso muchos seguidores del monstruo fueron claros «sin el cetro nacional nadie está contento»
Claramente otro factor que influye son los recuerdos de aquellos años dorados en que Saprissa y Alajuelense competían y hasta ganaban la Concacaf grande, aquellos años 90 y del 2000 al 2008 cuando esa posibilidad era real, pero hoy ese trofeo que lleva al mundial de clubes es un imposible al menos en la teoría para los clubes nacionales. Todo por un asunto de billetera
Entonces si es así, porque no caer en cuenta que esa copa que ganó Alajuelense y que seguramente volverá a ganar y estoy seguro que Saprissa y Herediano también levantaran., es el trofeo al cual podemos aspirar los clubes nacionales, y eso debe tener valor
No podemos decir que la Libertadores o la Champions, más bien sería la Europa League o la Copa Sudamericana, pero es lo que se puede ganar siendo realistas y por eso no debería ser importante sino re importante, como seguramente lo es para Olimpia, Motagua, Comunicaciones, Municipal, Alianza y ahora para el gran Real Estelí, por mencionar algunos nombres
Boca Juniors o River Plate buscará más la Libertadores o la Sudamericana que el cetro semestral argentino. Lo mismo pasará con Real Madrid, Barcelona, Manchester City, Juventus o cualquier otro. Yo sé la Concacaf está miles escalones abajo de ellos, pero es lo que nos toca
Pero si la Concacaf pronto le cambia el formato, el nombre , baja los premios o vuelve al viejo formato que de entrada obliga a jugar con los equipos del norte, pues entonces nunca terminará consolidará el producto y la visión al menos en Costa Rica seguirá siendo de ¿ realmente eso importa?, cuando la respuesta obvia debería ser sí
Claro no estoy diciendo que ser campeón nacional en diciembre perderá valor, máxime que» los títulos navideños» se recuerdan más que los de mayo, supongo que por el ambiente de fiesta que lo rodea. Fiesta que es completa cuando se derrota a sus rivales eternos. Así somos los ticos es mejor vacilar y sacarle pecho a los vecinos que a clubes de otros piases.
Por ejemplo los manudos y morados viven en su eterno debate en redes sociales, trabajos ,familias y grupos de amigos donde sentirse ganador es lo único que importa, obviamente un debate así con la gente de Olimpia o de Comunicaciones no sería igual.
O sea ahí se responde la pregunta que planteé en el titulo, «La copa que más importa es»… sentirse ganador en este debate lo cual desean todas las aficiones, pero sin duda donde más se desea hoy en día es en el Llano de Alajuela
Desde mi punto de vista no debería ser así y creo que eso llegará a cambiar, pero todavía no…
Periodista deportivo y estadígrafo